La situación actual del reciclaje de envases
¿Sabías que en España se consumen casi 60 millones de envases de bebidas de un solo uso cada día? Son más de 20.000 millones al año, una cifra similar a la que se consume en Alemania, con el doble de población. Sin embargo, hay una gran diferencia entre España y Alemania en la manera de gestionar el enorme volumen de residuos que esto significa.
Mientras Alemania ha implantado un Sistema de Retorno que recicla el 98,5% de los envases, convirtiéndolos en nuevos envases, en España siguen funcionando los contenedores de colores, que tan solo recuperan de manera separada 3 de cada 10. ¿Y qué pasa con el resto? Cada día, en nuestro país, se abandonan en el medio ambiente, se vierten o incineran 35 millones de envases de bebidas. De otros cuatro millones se desconoce el destino.
Los datos de recogida selectiva de residuos domésticos en España son muy bajos y apenas superan el 20%. Sobre los envases, se estima que se recogen selectivamente cerca del 35%.
El vertido o incinerado de estos envases nos cuesta 68 millones de euros cada año. Si a eso le sumamos otros 65 millones de euros que es el valor que tendría la materia prima (vidrio, aluminio, metal, plástico) en caso de que esos envases se recogieran de forma selectiva y pudieran reutilizarse y reciclares para crear nuevos envases, resulta que, cada año estamos derrochando 133 millones de euros.
¿Y qué pasa con los ciudadanos? El sistema actual es injusto. Las marcas de bebidas solo pagan por los envases que van al contenedor amarillo, en lugar de hacerlo por todos los envases que ponen en el mercado. La diferencia la estamos pagando nosotros, la ciudadanía, a través de los impuestos y tasas de residuos. Tampoco se cumple el principio europeo de “quien contamina paga”, hoy en día paga lo mismo quien recicla que quien no. ¿Es esto sostenible?