La preocupación cada vez más global sobre como la huella de los residuos que generamos daña nuestro planeta, principalmente mares y océanos, llevó la semana pasada a Coca-Cola en Gran Bretaña a posicionarse en favor de recuperar el hábito de devolver los envases de bebidas al comercio para evitar que acaben contaminando nuestro entorno. "El momento es el adecuado para probar nuevas medidas como un Sistema de Depósito bien diseñado para envases de bebidas, comenzando por Escocia", razonó en un comunicado la multinacional de bebidas.


Traducción: Giro de 180º de Coca-Cola sobre el Sistema de Depósito para botellas de plástico 

Esta decisión histórica, ha provocado que Coca-Cola en España haya mostrado públicamente su opinión sobre el asunto, sobre todo cuando en la Comunitat Valenciana quieren también acabar con las latas y las botellas abandonadas haciendo que se vuelvan a vender con depósito. En este caso, para la filial española sigue prevaleciando la posición institucional que la multinacional de bebidas marca desde Atlanta, por encima de la salud y la protección de nuestro territorio. 



A finales del año pasado, una filtración revelaba cómo desde el departamento de Relaciones Gubernamentales de Coca-Cola, calificaban las tasas a las bebidas azucaradas, el aumento de los objetivos de reciclaje, el uso de envases reutilizables y la implantación de Sistema de Depósito como políticas contra las que luchar en contra. Y, a diferencia de sus colegas británicos, Coca-Cola en España parece decidida a seguir a pies juntillas esas directrices. 



De hecho, Coca-Cola lleva luchando décadas para impedir la puesta en marcha de políticas que aumentan el reciclaje y protegen mejor el medio ambiente. El ejemplo más claro de esto ha sucedido en Australia en estos últimos años. Coca-Cola llevó a juicio a la región de los Territorios del Norte cuando decidió recuperar el hábtio de retornar los envases al comercio. Y Greenpeace en Australia lo denunció en el siguiente vídeo:



La región australiana venció el litigio ante Coca-Cola y, de hecho, diversas regiones más como Nueva Gales del Sur y Queensland también han apostado por hacer que las bebidas se vuelvan a vender con depósito para cuidar mucho mejor sus costas y playas.

En el mundo son ya más de 40 las regiones que han optado por complementar la recogida a través de contenedores de colores con el retorno de los envases de bebidas en el supermercado. En todos esos lugares, se recuperan de media el 90% de las latas y las botellas. Los contenedores consiguen gestionar parcialmente lo que se consume en el hogar, pero si se quiere evitar el abandono masivo de latas y botellas de bebidas, que es lo que más se consume en el exterior, el Sistema de Depósito es la única manera conocida en todo el mundo de conseguirlo. Ya que en los lugares en los que los ciudadanos no pueden devolver los envases al comercio, la realidad es que las latas y las botellas acaban contaminan seriamente su territorio. 



Deseamos que Coca-Cola en España sea capaz de seguir el ejemplo de sus colegas británicos y escuchar a la ciudadanía, que en diversas encuestas de opinión tanto nacionales como internacionales ha dado su apoyo masivo a recuperar esta práctica para proteger su entorno.